Señales de colesterol alto

Los niveles altos de colesterol no causan síntomas de por sí. Son los trastornos cardíacos y de los vasos sanguíneos los que pueden provocar los síntomas.

Estos niveles altos pueden causar enfermedades cardiovasculares y accidentes cerebrovasculares. Para entenderlo, es necesario conocer que el colesterol "malo", el unido a lipoproteínas de baja densidad c-LDL, transporta el colesterol del hígado a las células. Mientras que el "bueno", de alta densidad c-HDL, lleva el exceso de colesterol al hígado.

De este modo, las distintas enfermedades se pueden deber a un desequilibrio en los niveles de colesterol. Si el HDL es inferior a los niveles normales, no es capaz de transportar el exceso de colesterol de las células al hígado. Si el LDL es superior a los niveles normales, se producirá acumulación del colesterol en las paredes de los vasos sanguíneos, volviéndolos estrechos y duros (Figura 1). Esto provoca que el vaso sanguíneo transporte menos sangre al corazón, y con ello enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares.

Más información sobre el colesterol "bueno" y "malo".

Figura 1: Arteria normal frente a arteria estrechada por colesterol.

La importancia de conocer las señales de un nivel alto de colesterol

Dado que los indicios de colesterol alto no son visibles, es esencial revisar dichos niveles para prevenir las complicaciones relacionadas con el colesterol. La Sociedad Europea de Cardiología y la Sociedad Europea de Arterioesclerosis recomiendan comprobar los niveles de colesterol, especialmente el c-LDL y los niveles de colesterol total, en adultos mayores de 40 años y en personas de alto riesgo, con el fin de reducir la probabilidad de sufrir acontecimientos cardiovasculares. Además, conocer los síntomas de los trastornos cardíacos asociados con niveles altos de colesterol permite identificar la afección y buscar asistencia médica en una etapa temprana, lo que mejora el pronóstico de la afección. Asimismo, la ingesta de complementos alimenticios y alimentos funcionales, junto con cambios en el estilo de vida, como cambios dietéticos y la introducción de ejercicio bajo supervisión médica, puede ser útil.