Los accidentes cerebrovasculares isquémicos se producen por la falta de flujo sanguíneo al tejido cerebral, lo que puede deberse a coágulos sanguíneos que se formaron por depósitos de grasa en el interior de los vasos sanguíneos a través de un proceso denominado aterosclerosis. Los coágulos de sangre pueden bloquear el flujo de sangre normal en los vasos sanguíneos, lo que provoca un deterioro del riego sanguíneo al cerebro (Figura 1).1,2
Los accidentes cerebrovasculares hemorrágicos se producen por la rotura de un vaso sanguíneo en el cerebro, lo que provoca una fuga de sangre en los tejidos circundantes (Figura 1).3

Los siguientes son signos frecuentes de un accidente cerebrovascular:4
- Debilidad repentina
- Entumecimiento
- Signos de parálisis
- Problemas del habla
- Problemas de visión
- Mareos
- Problemas para caminar
- Dolor de cabeza intenso
Cuando una persona tiene un accidente cerebrovascular, normalmente solo se ve afectado un lado del cuerpo. Las náuseas y los vómitos son otros síntomas posibles.4
¿El colesterol alto puede causar un accidente cerebrovascular?
La respuesta sencilla a esta pregunta es sí. Ciertas afecciones están asociadas a un mayor riesgo de desarrollar un accidente cerebrovascular; el colesterol alto en sangre es una de estas afecciones. Tener demasiado colesterol en sangre puede provocar aterosclerosis (acumulación de depósitos de grasa en las arterias). Esto puede hacer que las arterias se vuelvan rígidas y estrechas, lo que dificulta el flujo normal de sangre. La aterosclerosis aumenta la probabilidad de que se desarrolle un coágulo de sangre.1,2
Averigüe las causas del colesterol alto.
Otros factores importantes que pueden aumentar su riesgo de desarrollar un accidente cerebrovascular incluyen presión arterial alta, ritmo cardíaco anormal persistente (fibrilación auricular), tabaquismo, consumo excesivo de alcohol, obesidad y diabetes.
El riesgo de tener un accidente cerebrovascular puede reducirse significativamente mediante la implementación de cambios sencillos en el estilo de vida para evitar problemas como la aterosclerosis y la hipertensión arterial.1
Comprenda la relación entre el colesterol y varias enfermedades cardiovasculares.
Pruebas de diagnóstico de accidente cerebrovascular
Un accidente cerebrovascular es una urgencia médica que requiere hospitalización inmediata. Una vez en el hospital, la evaluación inicial incluirá la exploración de las vías respiratorias, la respiración, la circulación y los signos vitales. A continuación, el profesional sanitario llevará a cabo pruebas exhaustivas para evaluar la causa de los síntomas e iniciar el tratamiento adecuado.2
- Las pruebas suelen incluir una tomografía axial computarizada (TAC) o una resonancia magnética (RM). Estas técnicas de obtención de imágenes cerebrales ayudarán a descartar hemorragias en el cerebro. Las pruebas deben realizarse de inmediato en los primeros 20 minutos después del accidente.2
- También puede hacerse un electrocardiograma (ECG). Se pueden ordenar pruebas analíticas para evaluar la troponina, el hemograma completo, los electrolitos, el nitrógeno ureico en sangre (NUS), la creatinina (Cr) y los factores de coagulación.2
Para descartar la hipoglucemia como causa de anomalías neurológicas, también se hace una prueba de glucosa mediante punción digital.2
¿Cómo se tratan los accidentes cerebrovasculares?
El objetivo de cualquier tratamiento de un accidente cerebrovascular es salvar la vida del paciente y minimizar el daño lo máximo posible. El tipo de tratamiento depende del tipo de accidente cerebrovascular.4
En caso de un accidente cerebrovascular isquémico, los médicos generalmente intentan romper el coágulo de sangre lo más rápido posible con medicamentos o con un catéter. En algunos casos, las hemorragias cerebrales deben detenerse con una cirugía.3,4
- La alteplasa es una enzima que ayuda a disolver los coágulos de sangre. El médico puede evaluar al paciente y comprobar si es un buen candidato para el tratamiento con alteplasa.3
- La trombectomía es un procedimiento de urgencia que se realiza para eliminar coágulos de sangre y restaurar el flujo sanguíneo al cerebro.3
Otros medicamentos que se usan para tratar el accidente cerebrovascular son los siguientes:3
- Anticoagulantes y antiplaquetarios: Pueden recetarse para reducir las posibilidades de formación de coágulos en el futuro.3
- Medicamentos que reducen el colesterol: Se recetan para reducir los niveles de colesterol. Se ha demostrado que los medicamentos que reducen los niveles de colesterol reducen el riesgo de accidente cerebrovascular. Al reducir los niveles de colesterol de lipoproteínas de baja densidad (C-LDL), estos fármacos ayudan a prevenir la formación de placa y, a su vez, el accidente cerebrovascular y la cardiopatía.3,5
- Medicamentos que reducen la presión: Se recetan si el paciente tiene presión arterial alta.3